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Los atolones

Las islas de las Maldivas están agrupadas en 26 atolones. La mayoría de las islas, incluyendo las islas turísticas (salvo pocas excepciones), forman un círculo alrededor de la laguna grande de cada atolón, parecido a las perlas de un collar. Estos atolones siempre tienen una estructura más o menos circular y lo mejor es contemplarlos desde gran altura. Los atolones circulares de las Maldivas son los más grandes del mundo y considerados en el mundo de la geología, por ejemplo por geógrafos, como el área típica para fundamentar la teoría de la formación de los atolones.

El origen

Se supone que los atolones tienen su origen en la Prehistoria cuando poco a poco las islas volcánicas se hundieron y arrecifes de coral empezaron a crecer alrededor de los conos redondos de los volcanes. Los corales se desarrollaron, por así decirlo, simultáneamente con el hundimiento de las islas y así se formaron los inmensos arrecifes de coral. Después de la desaparición completa de las islas sólo permanecieron los atolones como aún los conocemos actualmente. Esta teoría, formulada ya en 1842 por C. Darwin fue confirmada gracias a unas perforaciones, pero estas no han sido realizadas hasta ahora en las Maldivas.

La formación de los arrecifes

Se supone que una gran masa de tierra, llamada el dorso de las Maldivas, se hundió en el mar y los corales se empezaron desarrollar. Hay varias teorías que explican su forma redonda, sin embargo su veracidad se basa más en especulaciones que en hechos. Lo que es cierto es que el crecimiento completo de un arrecife de coral necesita mucho más tiempo, independientemente de la forma que tenga. El arrecife más viejo donde esto se puede verificar tardó casi 50 millones de años en completarse.

Los kandus, aberturas del arrecife

Para poder llegar a una isla o entrar a un atolón en barco, el anillo alrededor de la isla o del gran atolón tienen que tener una abertura de acceso en alguna parte del mismo. En la mayoría de los casos la naturaleza creó estas aberturas en el arrecife, los kandus, pero a menudo tuvieron que ser ampliadas e incluso construidas artificialmente. Dichas entradas fueron marcadas, a veces de forma muy original, para poder encontrarlas más fácilmente en caso de mal tiempo o por desconocimiento de la geografía local. Cuando un barco sobrepasa estas marcas, entrará en aguas mucho más tranquilas y seguras.